Esculpida con delicadeza
perfecta en toda mi anatomía
creada para posarme gozosa
en la proa del barco victorioso
Más de mí solo queda el cuerpo
para recordarme
insistentemente lo que soy
La cabeza la perdí hace tiempo
de tanto gritar en silencio
de pensar incansable
tratando de averiguar
el por qué de mi existencia
Los brazos se cayeron
agotados
de acunar el vacío
extremidades creadas
para abrazar
se quedaron petrificadas
y frías de esperar
al calor que no llega
Torso que define bien
cada curva de mi ser
remarcando los lugares
dónde debería haber vida
pero ya nunca la habrá.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Desde niño me fascinó esta escultura y en la primera visita a París fue lo primero que quise ver y disfrutar… Un placer.
Me gustaLe gusta a 1 persona
A mi me pasó un poco igual…y cuando la ví ahí sola me produjo aún más fascinación. La escogí como protagonista de este poema por lo que me hizo sentir y por todo lo que puede llegar a representar sin proponérselo…es inspiración. Gracias por estar y compartir. Un abrazo seguimos conectados.
Me gustaMe gusta
A veces el espejo nos devuelve esa imagen… la de una estatua rota, incompleta…Besos al vacío
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gran aportación como siempre Cruzar la noche..gracias por sentir y compartir. Un abrazo seguimos conectados!!
Me gustaMe gusta
Me encantó
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias! 😍 un abrazo seguimos conectados!
Me gustaMe gusta
Recuerdos. Un viaje rápido a París, visita obligada, prisa, corriendo, subir las escaleras y quedar parado. Excelente descripción, bellas palabras
Me gustaLe gusta a 1 persona
Sí que paraliza su presencia. Gracias por tu tiempo y tus palabras. Hay muchas mujeres como esa bella estatua.Un abrazo seguimos conectados!
Me gustaLe gusta a 1 persona